¡Algunas partidas en las colecciones clásicas no están terminadas!

Esto sucede porque, históricamente, estas partidas se registraron de esa manera y REALMENTE terminan en ese punto.

Es muy común que los maestros y grandes maestros no jueguen la partida hasta llegar al jaque mate. El jugador que está claramente perdiendo simplemente decide rendirse.

Esta decisión le ahorra tanto el dolor como la energía de continuar hasta el final de la partida, permitiéndole concentrarse en la siguiente. También se considera una especie de cortesía hacia su oponente: si sigues jugando en una posición perdida, puede interpretarse como que solo esperas que tu oponente cometa un error, ya que esa sería la única forma en que no perderías.

También puede suceder que ambos jugadores acuerden que la partida será un empate, ya que con mucha experiencia pueden reconocer estos casos. Entonces ambos deciden detener la partida ofreciéndose un empate, lo cual está permitido por las reglas del ajedrez. Si el árbitro también está de acuerdo, la partida se detiene y se registra como un empate.

También pueden darse otros casos especiales:


- Un jugador puede abandonar en algún punto de la partida si siente que, por alguna razón, no puede continuar (quizás porque se enfermó y necesita descansar).

- Un jugador puede comportarse mal en la sala del torneo y el árbitro decide declarar ganador a su oponente y excluirlo de la competición.

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Si deseas saber por qué se detuvo una partida, simplemente toca:

Partida > Información sobre la partida

Mira el resultado. Si es 1-0 o 0-1, entonces un jugador se rindió. Si es 1/2-1/2, fue un empate por mutuo acuerdo.

También existe un caso especial que ocurre muy rara vez. El resultado "*" (una estrella) significa que la partida no se terminó. Tal vez el torneo fue interrumpido, o es una partida histórica que no se ha recuperado completamente y no sabemos cómo terminó.